la soledad en el mármol
de la cocina
en las noches que secuestran
calcetines
en la esquina
que amontona
ropa sucia
la soledad en el polvo
que amenaza el filamento
en las gotas olvidadas
de pintura
en la tinta
que alimenta
este bolígrafo
la soledad
sentada
en una silla
terca
observándome incansable.
Y en mi
sólo el pulso repitiendo.
El párpado en letanía:
El párpado en letanía:
No querer
querer a nadie
No querer
querer a nadie
No querer
querer
A Nadie.
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